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Acarrear rencores o malos recuerdos no es productivo como bien sabemos.
Cuando se hace ejercicio es muy fácil poner tensión en los músculos equivocados, y la única forma de evitarlo es concentrándose en lo que se esta haciendo y fijándose donde esta la presión. La presión innecesaria solo cansa más y puede causar hasta daños en otros músculos. Además al poner presión en los músculos equivocados no se pone la presión correcta en los músculos que se intentan trabajar y los ejercicios son menos efectivos.
Así como al hacer ejercicio es fácil poner más tensión de la necesaria, en nuestras vidas pasa lo mismo al acarrear malos recuerdos y rencores por pequeños se sean.
Los malos recuerdos y rencores solo cansan y tensan. Son como la tensión innecesaria en los músculos, nos hacen menos productivos y felices. A veces acarreamos rencor sin darnos cuenta y este nos afecta causando peleas, improductividad, mal humor, depresión, tristeza etc. Mira este ejemplo:
Hace poco me reuní con una amiga quien me dio permiso de publicar su historia de forma anónima. Resulta que el esposo de mi amiga es quien siempre había llevado las finanzas. Mi amiga (la llamaremos Mary) le había huido a la administración del dinero. Cuando era soltera nunca ahorro ni un centavo y cuando se casó ella asumió que su esposo era bueno para las fianzas y dejó todo a su cargo.
Poco a poco Mary descubrió que su esposo no era tan bueno en finanzas y que perdió dinero en inversiones en el mercado de valores. Esto fue en un tiempo cuando todo mundo ganó dinero con estas inversiones.
Mary vio algo obvio, la mayoría de su dinero estaba en una cuenta de ahorros normales en lugar de estar invertida ganado mas interés. Mary empezó a tomar más decisiones y ahora manejan el dinero juntos y están ganando más interés.
Mientras meditaba, Mary se dio cuenta que ella nunca perdonó que su esposo hubiese perdido dinero y que no fuese tan bueno en finanzas. Cada vez que pelean Mary se acuerda de eso, cada vez que discuten finanzas Mary sin decir nada recuerda el dinero perdido.
Mientra hablábamos Mary me decía: yo sé que él tiene otras virtudes y nadie es perfecto, pero me da rabia que no ganamos en la expansión económica más grande en USA mientras que mis amigos si lo hicieron.
Yo le pregunté a Mary: que ganas recordando eso, que lección aprendiste y que has cambiado para remediar la situación. Mary aprendió a manejar dinero, a ser más independiente y más responsable. ¿Que gana recordando el pasado? Nada en absoluto, pero le es difícil olvidarlo.
En la vida siempre habrá personas que nos herirán, nos causaran trauma y dolor, pero si en realidad sino perdonamos, aprendemos la lección y olvidamos solo estamos poniéndonos carga innecesaria. Esta carga causa más dolor que el problema original.
Mira en tu vida que pensamientos te causan dolor o rabia y fíjate si necesitas perdonar y olvidar.
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